Tips para renovar tu colchón

Los colchones son un elemento indispensable para el correcto descanso de las personas. Las versiones modernas tienen diseños pensados para la máxima calidad de sueño y cuidan ergonómicamente la posición de nuestra columna y nuestro cuerpo. El colchón tiene que ser sustituido cada 10 años aproximadamente y adquirir uno nuevo no es tan fácil como ir a la tienda, elegir un colchón y pagarlo. Hay muchos aspectos a considerar para sustituir el viejo por uno nuevo. 

Para escoger el colchón adecuado en AC Descanso nos recomiendan que tengamos en cuenta nuestra posición predominante al dormir. Si duermes boca arriba, conviene que comprar un colchón duro. Si tu postura es generalmente de medio lado, escoge uno de menor firmeza. Tu peso también influye y es incluso más importante que la postura. 

Los colchones duros son indicados para personas de gran peso. Si por el contrario eres de contextura delgada, un colchón algo flexible puede ser la mejor solución. La textura de la tapicería es otro aspecto a considerar. Pregúntate si eres de las personas que tiende a tener calor con facilidad o si necesitas abrigarte con frecuencia. Los colchones de muelles son ideales en caso de que tiendas a tener calor mientras duermes. 

De hecho, están diseñados para ser frescos y se airean mejor. Los colchones de gomaespuma, de látex o viscoelásticos, son más o menos calurosos, por lo cual son recomendados si eres más friolero. Las condiciones alérgicas también cuentan y en este caso se recomiendan colchones de látex o espuma con coberturas lavables. 

Si duermes con alguien más en una cama, considera la opción de comprar 2 colchones, cada uno ajustado a las necesidades personales. Esto puede parecer una mala idea, pero si elegimos colchones de la misma altura y dimensiones puede ser la mejor opción. Un tema con gran importancia son las almohadas, que también influyen en gran medida en tu descanso. Como en el caso de los dos colchones diferentes, las almohadas deben seleccionarse en relación a las necesidades de cada uno. 

Las almohadas pueden conseguirse de materiales más o menos similares que la de los colchones, por tanto, básate en criterios similares para escogerlos, en cuanto a su dureza y materiales. Es importante que este tipo de inversiones las hagas en base a los criterios más adecuados, como se mencionó en los párrafos anteriores. Pocas veces merece la pena sacrificar un poco de calidad para ahorrar algo de dinero.